25 jul 2012

ARTROSIS DORSAL Y QUIROPRAXIA


La práctica de la vida cotidiana y la vorágine en la que estamos introducidos, nos obliga a enfrentar los años con un esqueleto apto y sin dolores.
Esto no resulta posible de llevar a cabo para el que padece artrosis dorsal.
La artrósis es el desgaste de una articulación; el producto de ese desgaste se traduce en ácidos cálcicos que se denominan osteofitos a los que el común de la gente conoce como "pico de loro". Estos picos en ocasiones se movilizan y se desplazan ubicándose sobre algún nervio, provocando dolor no solo en el lugar mismo de la vértebra afectada, sino también produce irradiaciones que, como un cinturón, abraza y oprime a quien lo sufre.
Generalmente la lesión no reviste gravedad, los episodios pueden ser agudos, en particular cuando el individuo ha realizado algún esfuerzo.
Es más frecuente encontrar estos problemas en personas de más de cuarenta años, siendo a su vez más propensas las mujeres que los hombres a padecerlas. Pareciera ser que las hormonas y la edad menopáusica juegan un rol importante en esta afección.

Síntomas

Los síntomas pueden ser muy variados dependiendo del origen, desde un dolor constante y difuso en la región dorsal hasta un dolor agudo localizado a un lado de la vértebras dorsales que puede irradiarse a lo largo de la costilla, incluso pudiendo dificultar la respiración o movimiento del tronco o cuello. La gran mayoría de veces el dolor transmitido por el nervio, se debe a un espasmo muscular por la alteración mecánica de estas articulaciones interapofisarias y/o costo-vertebrales. Los pacientes aquejan dolores intensos, que va desde la espalda al pecho; por lo que piensan siempre, equivocadamente, en algún problema pulmonar o cardíaco.

Además nos podemos encontrar con:

  1. Sensación de carga y pesadez
  2. Aumento del dolor sobre todo en posturas prolongadas y que en muchos casos lo describen como la sensación de tener un cuchillo clavado en la espalda.
  3. Limitación de movimiento, en algunas ocasiones.


Tratamiento desde la Quiropraxia

Descartando posibles causas de dolor dorsal de origen visceral, y tomando como referencia que el origen de la misma sea osteomioarticular, podemos hacer mucho desde la quiropraxia, ayudando a alinear la columna vertebral, disminuyendo notablemente la sintomatología y mejorando la calidad de vida.
Pero esto no es todo, es importante asociar la fisioterapia y normas de ergonomía laboral. Se ha de estudiar el puesto de trabajo de cada persona para aconsejar sobre las posturas y el mobiliario más adecuado, a fin de evitar que el problema retorne y se haga crónico. 

 IGNACIO G. DÍAZ
LIC. EN KINESIOLOGÍA Y FISIATRÍA
QUIROPRÁCTICO

18 jul 2012

CIATICA POR SÍNDROME DEL PIRIFORME


La ciática es la irritación del nervio ciático, un nervio principal que se origina en la columna inferior y viaja profundo en la pelvis hacia los glúteos inferiores. Desde ahí pasa a lo largo de la region posterior de cada pierna y se divide en la rodilla en ramas que van hasta los pies. La ciática típicamente causa dolor que ataca el muslo o el glúteo.
Cualquier cosa que cause irritación o ejerza presión en el nervio ciático puede causar ciática. La causa más común probablemente es un esguince o una torcedura de los músculos o ligamentos en el área y por esta razón la ciática con frecuencia se asocia con el dolor de espalda baja.
El síndrome del piriforme es una irritación del nervio ciático causado por el aumento de la tensión o espasmo del músculo piriforme.

El músculo piriforme es  pequeño y profundo, situado en la región glútea, debajo de las nalgas y tiene la función de rotación externa del muslo (que es cuando la rodilla "mira" hacia fuera), y ayuda en la abducción  (apertura del muslo). Va desde el sacro (la parte final de la columna vertebral) hasta el fémur (hueso del muslo). El nervio ciático pasa por debajo de este músculo, pero en algunas personas (10%) pasa a través de él, lo que aumenta la predisposición al síndrome. Algunos estudios han reportado una mayor prevalencia de casos entre las mujeres en una proporción de 6:1.

En algunos casos la tensión del piriforme es debida a una disfunción de la articulación Sacro-ilíaca, o un mal posicionamiento del sacro.
Este síndrome particular, a menudo se puede confundir con el dolor del ciático por pinzamientos o hernias de disco, a menudo se diagnostica erróneamente basados en las resonancias magnéticas en donde se pueden observar hernias de disco asintomáticas. Este error puede llevar al fracaso de los resultados de una cirugía ya que en ella no actuaron sobre el origen real del problema.
Es común en los deportes que requieren correr, cambiar de dirección o de la carga de peso excesivo. Correr en terrenos duros o escaleras irregulares, escalada, etc.
Mantener una postura sentado mucho tiempo, especialmente con la pierna en rotación externa (como conducir) disminuye la sangre a la región del músculo y altera la fisiología del piriforme  y causa acortamiento.
Cualquier plan de tratamiento debe incluir estiramiento de los músculos  glúteos y el músculo piriforme. Su quiropráctico puede ayudarle, dándole instrucciones sobre los ejercicios apropiados  a realizar. 


Muchos quiroprácticos también pueden recetar algún tipo de masaje que se realiza en el músculo piriforme en la región glútea con el fin de relajar estos músculos. El ajuste de la columna vertebral, del sacro y de la cadera también pueden ser necesarias para aliviar los síntomas.

IGNACIO G. DÍAZ 
LIC. EN KINESIOLOGÍA Y FISIATRÍA
QUIROPRÁCTICO

11 jul 2012

DOLOR DE CUELLO Y HOMBROS


El dolor de cuello y de hombros es otro problema común por el cual las personas buscan un Quiropráctico.
Los dolores de cuello pueden estar ocasionados por problemas en las cervicales y acompañados por dolor de cabeza, mareo, o vértigo. El Quiropráctico estudia y corrige la posición de las vértebras y normaliza las tensiones musculares que contribuyen al dolor de cuello y de hombros. A veces la pelvis también está implicada causando distorsiones y compensaciones, el Quiropráctico considera esta posibilidad para dar un resultado permanente a problemas de dolor de cuello.
Los dolores de cuello y de hombros son muy comunes por posturas laborales especialmente en gente que está sentada todo el día. Las tensiones en la musculatura se acumulan y con el tiempo afectan a la estructura y la relación entre las vértebras de la columna. Esta situación sin corregir se dirige hacia la degeneración (artrosis) de las vértebras. Es fácil e importante corregir esta situación, el problema es que la gente espera mucho tiempo en buscar una solución definitiva. El masaje puede ser útil pero por sí solo no corrige los patrones de distorsión que conlleva este problema. La Quiropráctica busca dar una solución definitiva.

Los hombros

Por el control que el sistema nervioso tiene sobre la musculatura de la nuca y los hombros es importante la relación de las vértebras en las cervicales y el efecto que esto tiene sobre los nervios.

La Quiropráctica:


  1. corrige los problemas en las cervicales,
  2. reduce la tensión sobre la musculatura y de este modo el cuerpo recupera su función correcta y soluciona el problema.

Tensiones en los hombros afectan el cuello y a largo plazo producen las condiciones de compresión y fallos mecánicos que comienzan la degeneración de la columna. Con el tiempo esta degeneración afecta el disco y puede entre otras cosas crear hernias discales o protusión de disco.

La rectificación de la curvatura (lordosis) del cuello también acelera la degeneración (artrosis) del mismo por las tensiones mecánicas incorrectas sobre la columna.
Accidentes, golpes, latigazos y posturas laborales son algunos de los factores importantes que comienzan a afectar a los hombros y el cuello. Cualquier persona que haya llevado un collar cervical por motivo de latigazo debería hacerse una revisión con un Quiropráctico porque el latigazo y sus consecuencias en la mayoría de los casos desencadenan degeneración de la columna que no se aprecia por años.
Muchos adolescentes ya muestran posturas y hábitos que están empezando los patrones de distorsión que años más tarde se verán como dolores y problemas de salud. Ajustes Quiroprácticos pueden prevenir y evitar mucho sufrimiento para ellos en el futuro.

IGNACIO G. DÍAZ - LIC. EN KINESIOLOGÍA Y FISIATRÍA - QUIROPRÁCTICO

3 jul 2012

QUIROPRAXIA EN TERCERA EDAD


El envejecimiento es un proceso natural y normal, pero una persona que padece problemas estructurales, como degeneración de las articulaciones vertebrales, presentará numerosas afecciones que no tendría si hubiera sido corregida la degeneración.
Por ello, es tan importante tomar medidas preventivas para frenar los aspectos más desvitalizantes del envejecimiento. Las personas mayores tienen algunas condiciones particulares de la edad.
Con el cuidado Quiropráctico las personas mayores consiguen:

  • tener menos dolor,
  • tomar menos fármacos,
  • frenar la artrosis,
  • frenar la osteoporosis, e
  • incrementar la elasticidad y el movimiento.

A través de los años el cuerpo empieza a decaer, el objetivo de la Quiropráctica es retener el mayor funcionamiento del cuerpo para ralentizar los efectos de la edad.

LA QUIROPRÁCTICA AUMENTA LA CALIDAD DE VIDA EN PERSONAS MAYORES 


Los estudios demuestran que la Quiropráctica mejora notablemente la calidad de vida y la salud en los pacientes de edad y reduce la necesidad de tomar medicamentos. Un estudio realizado por la Rand Corporación en 1996 en un geriátrico norteamericano con los pacientes mayores de 75 años incluye un detallado análisis de los datos obtenidos durante tres años. Este estudio, revela que los pacientes que recibieron cuidados Quiroprácticos vieron disminuidos sus síntomas, obtuvieron mejor calidad de vida, disminuyeron las enfermedades crónicas, tuvieron que administrarles menos medicamentos y pasaron menos días hospitalizados que aquellos que no recibieron cuidados Quiroprácticos.
La Quiropráctica le permite, a pesar del paso de los años, mantenerse activo, consciente a sus músculos, articulaciones y nervios funcionar correctamente, sin el dolor que pudiera impedirle llevar una vida sana.
Se trata de aumentar la calidad de vida, y de sacarle más partido y rendimiento al cuerpo.
Los cuidados Quiroprácticos son seguros y no tienen efectos secundarios.
No cometa el error de pensar que es demasiado viejo, muchos pacientes mayores han visto para su sorpresa su calidad de vida incrementada bajo cuidado quiropráctico. Actualmente, el paciente de nuestro centro de más edad es de 87 años. No dude en comprobar su columna no tiene nada que perder.

IGNACIO G. DÍAZ - LIC. EN KINESIOLOGÍA Y FISIATRÍA - QUIROPRÁCTICO